Reclamaciones sobre productos cosméticos

¿Qué es una reclamación?

Una reclamación es una petición o una demanda que una persona plantea ante otra con el objetivo de resolver un problema concreto. Estas reclamaciones se pueden realizar ante una institución o un comercio, ya que los clientes tienen derechos como  consumidores y pueden defenderlos ante un establecimiento.

¿Y qué es una hoja de reclamaciones?

Es el documento a través el cual un consumidor puede dejar constancia de una queja relativa a un bien o un servicio adquirido. Una hoja de reclamaciones oficial es aquella aprobada por la Administración pública y que impone obligaciones a los establecimientos abiertos al público en cuanto a su posesión y tramitación. 

Ejemplo de hoja de reclamaciones del Principado de Asturias

Una vez explicados estos términos, ya podemos empezar a hablar de las reclamaciones sobre productos cosméticos.

Reclamaciones sobre productos cosméticos

Las reclamaciones en este tipo de productos es algo controversial, ya que al ser productos que se utilizan al contacto con la piel y las secreciones del cuerpo, no suelen dejar devolverlos una vez abiertos porque por seguridad no podrían volver a ponerlos en venta.

Recomendaciones a la hora de utilizar productos cosméticos

• Si adquirimos cosméticos, debemos fijarnos bien en el etiquetado que lo acompaña en aspectos como el nombre del producto, el de la entidad responsable de la puesta en el mercado, la fecha de duración mínima, el número de lote y la lista de ingredientes.

• Si no entendemos algo de lo que viene en la etiqueta, no dudar en consultar al personal especializado del establecimiento.

• No debemos adquirir productos sin etiquetado, ya que ésta ofrece una garantía de seguridad.
  
  
• Debemos comparar los precios para un mismo producto cosmético en distintos establecimientos antes de decidirnos a comprarlo, ya que en algunas ocasiones pagamos productos igual formulados a otros más asequibles solo por la compañía que nos lo esta vendiendo.

• Debemos de conservar siempre la factura o ticket de compra para posibles reclamaciones.

• Tenemos que tener especial precaución al emplear estos productos, ya que la piel es algo muy sensible y podemos utilizar productos inadecuados a nuestro tipo de piel.
  
  

• Los establecimientos que comercializan cosméticos están obligado a disponer de la Hoja de Quejas y Reclamaciones oficial a disposición de la persona consumidora o usuaria que la solicite. 

 

Un ejemplo donde sí podrían satisfacer nuestra reclamación sería que una crema estuviese caducada y nos causase una reacción alérgica; por otro lado, dónde sería muy difícil conseguir lo que pedimos sería utilizar una base de maquillaje indicada para pieles grasas (que buscan matificar la piel, formuladas con componentes que la resecan) en nuestra piel seca y provocar una deshidratación de ésta por nuestro mal uso.