ADMINISTRACIÓN Y GESTIÓN

ADMINISTRACIÓN Y GESTIÓN

lunes, 2 de octubre de 2017

CONCEPTO DE REUNIÓN Y TIPOS

Una reunión consiste en el encuentro de dos o más personas en un lugar y momento dados, de una forma espontánea o planificada, con el propósito de lograr un objetivo común a través de la interacción verbal.
Dentro del ámbito laboral, las reuniones de trabajo forman parte de las comunicaciones colectivas verbales que se dan en la empresa. Se emplean para transmitir información a los miembros de un grupo, para la resolución de conflictos o para la consecución de acuerdos a través de la negociación.
Estas reuniones deben ser lo más eficientes y productivas que sea posible. Por ello, tendrán un propósito claro y conocido por los asistentes a la reunión y se desarrollarán de forma organizada, estableciendo una agenda de los asuntos a tratar y un lugar y hora determinados.
Debe fomentarse la participación de todos los convocados, creando un ambiente adecuado que busque su comodidad, citando solo a aquellos que sean necesarios y no debe extenderse más de de lo necesario para evitar interferir en exceso en las tareas de los asistentes.
Existen tres tipos de clasificaciones para las reuniones:
Según el protocolo:
-    Formales: siguen un procedimiento establecido de antemano, existe un presidente y un secretario, siguen un orden del día y lo hablado en ellas se recoge en un acta.
-        Informales: No cuentan con un protocolo establecido.
Según los participantes y la organización:
-        Internas: Se desarrollan dentro del ámbito de la empresa y los participantes formal parte del personal de la misma.
-          Externas:
o       Organizada por nuestra empresa convocando a personal ajeno a la misma.
o     Organizada por una empresa ajena a la nuestra, siendo nuestros empleados los que acudan a ella.
Según los objetivos a conseguir:

  •      Reuniones amistosas. Son las que se realizan con el grupo de amigos y el objetivos es encontrarse con los otros, pasar un buen rato, conversar, etc. No hacen falta ninguna técnica o procedimiento para llevar a acabo este tipo de reuniones. Estas pueden darse tanto dentro del trabajo como fuera. Aunque es más probable que se den fuera, ya que dentro es difícil al estar trabajando continuamente.

  •    Reuniones formativas. El objetivo es crear opinión y transmitir ideas. Cada persona aporta al resto sus propias informaciones y conocimientos para que el grupo vaya aprendiendo y progresando en conjunto. El estudio de casos, los métodos educativos, el aprendizaje basado en la experiencia y las simulaciones de roles son algunas de las técnicas que se emplean en las reuniones formativas. Pero cuidado, no todo curso, seminario o conferencia es por sí mismo una forma de reunión.

  •    Reuniones informativas: El objetivo de las reuniones informativas dependerá de la intención con la que hayan sido convocadas: para informar al grupo asistente o para recabar información del grupo.
                          - Cuando el objetivo sea informar.
Se emplearán para dar a conocer la toma de una decisión, para instruir al grupo sobre la forma de llevar a cabo un nuevo procedimiento o para dar respuesta a algún tipo de inquietud que pueda interferir en el funcionamiento de la empresa.
Este tipo de reuniones se caracterizan por ser unidireccionales, la información se transmite desde el responsable de la convocatoria al grupo de asistentes, que deben recibirla de forma clara y comprensible.

   - Cuando el objetivo sea recabar información.
Su finalidad es buscar opiniones sobre un proyecto o decisión que aún no se haya puesto en práctica, captar el estado de ánimo o sentimientos del grupo u obtener ideas.
No hay debate, y la comunicación se produce de forma unidireccional desde el grupo asistente hacia el presidente de la reunión.

  •    Reuniones consultivo-deliberativas: Su objetivo es discutir uno o varios asuntos para recoger las opiniones de los asistentes y adoptar acuerdos mediante el debate. La información se transmite de forma multidireccional, la comunicación se desarrolla con formalismo, predominan las intervenciones individuales y los acuerdos se toman por mayoría de votos o por decisión del jefe. Su principal problema es que generan ganadores y perdedores.

  •    Reuniones para llegar a un acuerdo: También llamadas reuniones de estrategia o reuniones de negociación.  Se trata de conciliar intereses y alcanzar acuerdos. Los asistentes deben presentar sus posturas, opiniones y sugerencias. El moderador debe intentar llegar a un acuerdo y ser imparcial. 

  •     Reuniones centradas sobre el grupo: Se producen con la finalidad de sensibilizar a los participantes sobre sus problemas o conflictos internos. Los asistentes deben participar de forma activa y el conductor sólo observa y modera la reunión. Se utilizan técnicas de dinámicas de grupo para llevar a cabo este tipo de reunión.

  •    Reuniones de trabajo: Son una herramienta utilizada para elaborar planes, diseñar estrategias, evaluar desempeños y fomentar la participación de los empleados. Tienen como finalidad tomar decisiones y solucionar problemas, proporcionando una gestión participativa en una organización.

  •    Reuniones para intercambiar experiencias: El objetivo de estas reuniones es que cada participante exprese su opinión, conocimientos o experiencias sobre un tema o problema ante el resto de participantes, de manera que se puedan tomar decisiones teniendo diferentes perspectivas y sacando inspiración del ejemplo de otras personas.

  •    Reuniones creativas o para generar ideas. El objetivo principal de estas reuniones es proponer ideas sobre un tema concreto. Para ello se utilizan técnicas como el brainstorming y no se juzgan las ideas de los demás. El lugar de la reunión debe ser original, cómodo. El ambiente debe ser distendido, positivo y participativo. Es habitual en este tipo de reuniones hacer que los participantes vayan vestidos de un color concreto o poner la reunión a una hora poco usual, como las 11:11.

  •    Reuniones de significación. Se derivan de nuestra necesidad e impulso por encontrar una razón de ser, aplicable a nuestra vida y acciones, que nos ayude a encontrar respuestas que den significado a aquello que nos rodea. Se tratan temas como el sentido de la vida o de la muerte. Para ello se establecen dinámicas que aúnan la participación y la reflexión, siendo fundamental la creación de un clima de confianza en el que los asistentes puedan sentirse cómodos.

Por último, tenemos una serie de reuniones propias de un entorno laboral formal:

  •    Comisión: Las comisiones trabajan de forma activa en los proyectos y las tareas necesarias para el buen funcionamiento de la empresa. Proponen y desarrollan acciones y líneas de trabajo. Además, se ocupan de informar sobre las cuestiones relacionadas con sus competencias a personas independientes, grupos o asambleas. Es un grupo de carácter abierto de socios y simpatizantes, con uno o más coordinadores que son portavoces y/o promotores de las tareas que se llevan a cabo.

  •    Comité: Es un grupo de personas encargadas de un asunto, especialmente en representación de un colectivo. El comité está formado por personas que trabajan en la institución o empresa y son elegidas de forma democrática. La composición numérica del comité se rige según el número de trabajadores que hay en la empresa. Los cargos de un comité empresarial son el presidente, los directores generales y los directores de los distintos departamentos.


  •       Consejo de administración: Es el órgano directivo de las grandes empresas (sociedades anónimas). Tiene como objetivo, entre otros, orientar los asuntos de la organización y velar por los intereses de los accionistas a través del control de la alta dirección, actuando así como órgano intermedio entre accionistas y equipos directivos. Está regulado por los estatutos de la compañía.

  •      Junta General de Accionistas: Es una reunión de los accionistas de la Sociedad Anónima convocada para tratar aspectos de la sociedad. Esta se divide en dos: Junta General Ordinaria y Junta General Extraordinaria. Es obligatorio por ley realizar al menos una Junta General Ordinaria para decidir sobre los siguientes asuntos: proceder a censurar la gestión social, aprobar, en su caso, las cuentas anuales del ejercicio anterior y decidir sobre la aplicación del resultado. Por otro lado, la Junta General Extraordinaria son todas aquellas que se realicen después de la Junta General.

Para finalizar, os proporcionamos un vídeo con una serie de consejos para llevar a cabo una reunión efectiva:




¿CÓMO HABLAR EN PÚBLICO PROFESIONALMENTE? 🙆


Está demostrado que actualmente el ser humano tiene una capacidad de atención de 4 segundos (inferior a la de un pez), anteriormente la capacidad estaba en 10 segundos, pero esta ha disminuido con la aparición de la tecnología.


Debido a ello, cada vez es más importante preparar unas presentaciones orales más creativas con la finalidad de mantener la atención del público a lo largo de la exposición.
Empezar con una pregunta retórica, historia o anécdota, con una dato o comentario llamativo es algo positivo, ya que atraerá la atención del público y también demostrarás más confianza y credibilidad.
También podrás presentar datos impactantes, recientes y realizar una pequeña investigación para asegurarte que proviene de fuentes serias y verificables. Si la reunión es informal, también podrás utilizar humor pero has de tener en cuenta que tu trabajo en ese momento no es contar chistes, ya que la manera de contarlo depende de la persona, y no todos/as contamos las cosas de la misma manera.


RECOMENDACIONES A TENER EN CUENTA A LA HORA DE HABLAR EN PÚBLICO

Con relación a la forma de hablar:
  ü  Adecuar nuestro vocabulario y nuestra forma de expresarnos a el auditorio frente al que realizamos la exposición.
  ü  Adaptar el volumen de nuestra voz al lugar en el que se realiza la exposición.
  ü  Utilizar un vocabulario variado y fluido, evitando así repeticiones innecesarias como son también las muletillas.
  ü  Buscar un vocabulario agradable, que demuestre firmeza a su vez.
  ü  Vocalizar correctamente para facilitar la compresión de nuestra exposición.
  ü  Preocuparnos por nuestro lenguaje corporal, la clave está en buscar un movimiento natural y que apoye nuestro mensaje, evitar los extremos (movimiento excesivo o brusco y la rigidez).

Con relación al formato de exposición:
  ü  Actuar de forma natural y accesible al público es decir todo lo que se exponga debe ser fácilmente comprensible por todos nuestros oyentes.
  ü  Se debe llevar un ritmo ágil y fluido a lo largo de la exposición, incluyendo a lo largo de nuestra exposición elementos que mantengan la atención de nuestro espectador.
  ü  Mantener un orden a la hora de exponer el tema, sin hacer saltos entre diferentes aspectos del tema a tratar.
  ü  El tiempo de exposición ha de estar siempre ajustado, por eso hay que evitar la improvisación.
Siguiendo todas estas recomendaciones lograremos una exposición correcta y agradable para nuestro público, aun así para lograr un resultado óptimo hay ciertos trucos que pueden usarse en diferentes ocasiones y dependiendo del ámbito en el que se realice la exposición.


¿CÓMO PUEDEN NUESTROS SENTIMIENTOS ESTROPEAR UNA BUENA EXPOSICIÓN?  😕

Los sentimientos juegan un papel crucial a la hora de hacer una exposición pública, la comunicación necesita estar acompañada tanto de la palabra como del lenguaje corporal, y es ahí, donde se evidencian los principales síntomas para catalogar una buena exposición de una no tan buena.
Hay muchos factores en nuestro cuerpo que advierten de nuestro estado, algunas personas sufren síntomas muy comunes como: sequedad en la garganta, picores y urticarias provocadas por el stress nervioso, incontinencia, calor y sudoraciones, aumento del ritmo cardiaco (pudiendo llegar a experimentar palpitaciones), etc. Lo más importante es saber que cada cuerpo es un mundo y cada persona puede tener unos síntomas muy diversos y diferentes, la clave es saber contrarrestarlos.



PRINCIPALES CONSEJOS PARA SABER HACER FRENTE A ESTOS SENTIMIENTOS: 😱

Saber cuáles son nuestros puntos fuertes y débiles, qué cualidades pueden jugar una buena baza a nuestro favor para sentirnos más cómodos y sacarnos más provecho en cada tipo de exposición.
Buscar pequeños trucos para controlar nuestra respiración y pulso, evitando un aumento de los niveles de cortisol (hormona del stress) en nuestro cuerpo.
Aprender a disimular sin hacer pausas en nuestro discurso, muchas veces habla más nuestro lenguaje corporal que las propias palabras que decimos.


TRUCOS A LA HORA DE HABLAR EN PÚBLICO  😝

Hablar en público es una actividad desagradable para muchos y cuanto mayor sea la importancia del evento, peor el miedo. Sin embargo, deberás enfrentarte constantemente a exposiciones y presentaciones, ya sea ante tu equipo, socios, clientes o posibles inversionistas. Y debes hacerlo de la forma correcta para conectarte con tu audiencia.
Los trucos más importantes para convertirte en un buen orador y aprender a expresar tus ideas ante una audiencia, ya sea de diez, cien o mil personas son las siguientes:
-          Colocar el micrófono a la altura correcta (si lo hubiera) y comprobar que hay sonido en toda la sala.
-          Organizar bien la introducción, el desarrollo y la conclusión de la exposición.
-          Expresarse con sencillez:
·         La gente que te escuche captará una o dos de las principales ideas que expongas.
-          Organízate:
·      Sea larga o corta tu disertación, es importante ordenar los elementos de la misma. Hay que prever la introducción, los puntos principales que se van a exponer y la conclusión.
-          Cuanto mayor te lo sepas, menos nervios tendrás. Y si es un tema que dominas, mejor.
-      -   No digas frases de tipo “Ay que nervioso estoy”, “me he perdido” o “ me he equivocado”. ¡No! -   -   Si te pierdes, te equivocas o estás nervioso, te lo callas, es muy probable que un porcentaje de la audiencia no se haya dado ni cuenta, ¡no se lo hagas notar tú!.
-      -   No abusar de los gestos y la expresión corporal.
-      -   Interactuar con los oyentes para hacerlo más ameno.
-      -   Evitar cualquier tipo de distracción: móviles, ruidos, música, etc.
-      -   No extenderse en los agradecimientos y en los conocimientos previos.

-      -   Mantener la cabeza elevada y mirar al frente.



    Grupo Bruno Álvarez, Carolina Fernández, David Pérez, María Bisila y Cristina Pérez.
FASES DE UNA REUNIÓN
Cuando piensas en una reunión lo más seguro es que, a tu mente, llegue la imagen de un grupo de personas reunidas discutiendo un asunto; con papeles delante, revisándolos, dando opiniones, tomando decisiones, etc. Sin embargo, aunque esa es la reunión propiamente dicha, una reunión no comienza solo con esa fase sino que hay otras dos más que son claves para alcanzar el éxito.


 Las reuniones se componen de tres fases que han de realizarse. La primera de ellas se da antes de que la propia reunión tenga lugar y es la más importante. Esta fase tiene como objetivo el tratar de prepararlo todo (sacar las copias de los informes, saber cuál es la sala donde va a tener lugar la reunión, preparar la sala (calefacción, aire acondicionado, ventilación, iluminación, bebida, etc.) así como la convocatoria, es decir, avisar con tiempo más que suficiente a las personas que asistirán a la reunión.
Después de eso es cuando se realiza la reunión en sí, se presentan los distintos temas a tratar, se dan varios puntos de vista y se toman y anotan las decisiones. La última fase tiene lugar una vez ha terminado la reunión, y se basa en llevar a cabo las decisiones que se han acordado; poniendo en marcha las acciones acordadas y realizando un seguimiento de las mismas.
En este vídeo pueden verse 5 consejos sencillos pero eficaces para realizar una reunión de manera eficiente:


Con todo, la reunión constaría de tres fases: la primera tendría lugar antes de la propia reunión, durante la fase de preparación; la segunda fase sería la propia reunión, y la última sería la realización de las acciones acordadas durante la reunión.

GRUPO 1: Isamar, Pablo, Aitor, Yviluz y Miguel.